La Escucha es la Escucha

La escucha es una asimilación de sonidos memorizados, que adquiere todo ser humanos desde su nacimiento.

La escucha es percibir un sonido, escuchar algo, un murmullo, un grito, una melodía, una onda propagada que choca en el tímpano, convirtiéndose en una palabra, una frase o una conversación.

Asimilado o no cerebralmente, siempre será solo eso, un sonido. Solo algo que se escucha por escucharse, que se aprende por aprenderse, o se repite por repetirse.

La escucha, es la escucha; se nace escuchando, se muere escuchando. El escuchar desarrolla el sentido de la audición, estimulando el oído, haciéndolo sensible o insensible, sensato o insensato, racional o irracional.

La escucha va mas allá del oír “nacimos oyentes, y gracias a ello hablamos por que nos hablaron, hablar es responder la palabra”, hablar es el complemento de la escucha, escuchar es retener, entender y captar. Hablar amerita escuchar, hablar por hablar genera oír.

Teoria y Práctica

Hermeneutica Teoría y Práctica.

La teoría y la práctica se fundamentan en la dependencia que hace la una sobre la otra, creando diferentes puntos de vista sobre cuál de las dos se lleva a cabo primero. Para alcanzar un saber definitivo y convincente siempre es necesario complementar la teoría con la práctica ya que  lo teórico no solo se basa en lo escrito sino también en lo visto, en el saber y en la experiencia y para adquirir esta experiencia es indispensable practicar lo aprendido teóricamente.

Hay muchos refranes populares sobre este concepto como “la practica hace al maestro”  siendo esta la principal, poniéndola por encima de la teoría y de los conocimientos dándonos a entender que es la  más importante en la sociedad aunque para algunos filósofos no sea así.

TEXTO SOBRE EL OIR

Reflexión Sobre El Oír

Ana María Londoño Betancur

A veces cuando todo el mundo habla, me gusta conversar conmigo misma y descubrir la cantidad de palabras que digo, sin significado o sin sentido; solo sé que las digo.

Comprendo lo que hablo, pero nadie entiende lo que digo, y si logro que alguien entienda lo que quiero decir, sus gestos me dicen que no están de acuerdo con lo que digo.

Un discurso manipulado, el cual maneja un espacio, donde la palabra fluye, se construye, y forma pensamientos llenos de interrogantes, el cual forma diálogos y conversaciones interpretativas, donde se llega a la conclusión de lo que realmente se quiere expresar.

Pienso, hablo, expreso lo que pienso, escucho, pero no digo; en un paréntesis mental construyo preguntas silenciosas, que al oír en el silencio más profundo responden lo que hablo.